¿Qué es el lupus?
Es una enfermedad autoinmune, crónica y multifactorial, no tiene una causa conocida aunque la investigación evidencia la implicación de una base genética predisponente sobre la que pueden intervenir múltiples factores ambientales, como la luz solar, y factores sociales, concretamente el estrés.
Todo ello puede provocar la exacerbación de la enfermedad.
Suele ser diagnosticado a edades tempranas, más comúnmente, a mujeres en edad fértil (9 de cada 10 afectados son del sexo femenino), aunque también afecta a varones y se puede presentar en cualquier edad.
El espectro de la enfermedad es muy amplio, es multisistémica, puede atacar a diversos órganos así como presentar manifestaciones osteomusculares y cutáneas por lo que las personas afectadas requieren una atención específica y continua de diversos especialistas.
Por ello el Lupus se puede definir comúnmente como la “enfermedad de las mil caras” ya que se manifiesta en cada paciente de un modo completamente diferente.
Los periodos de activación (brote) e inactividad (remisión) tan característicos del Lupus, hacen que sea una enfermedad muy imprevisible que conlleva una merma en la calidad de vida de los pacientes, que se ven obligados a adaptar su vida a las limitaciones y secuelas.
La forma más frecuente de presentación de esta enfermedad autoinmune es el LES (Lupus Eritematoso Sistémico), una condición por la cual el mecanismo de defensa de nuestro organismo comienza a atacarse a sí mismo creando un exceso de anticuerpos en el torrente sanguíneo que causan inflamación y dañan las articulaciones, los músculos y otros órganos.
Provoca episodios de inflamación en las articulaciones, los tendones y otros tejidos conectivos y órganos. También presenta síntomas generales, como el cansancio fácil, la pérdida de peso inexplicable y la fiebre prolongada, además de dolor e inflamación en las articulaciones, en manos, muñecas, codos, rodillas y pies con más frecuencia, es posible que aparezca rigidez articular por las mañanas.
También es frecuente la afección en la piel y la caída del cabello. Además, los enfermos de lupus padecen hipersensibilidad a los rayos ultravioletas y si se exponen sin protección la enfermedad puede reactivarse. El Lupus Discoide afecta, por lo general, sólo a la piel, pero en algunas ocasiones puede degenerar en Sistémico.